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sábado, 24 de abril de 2010
Introducción:
Lorena Ochoa, mexicana ella y número uno del golf mundial femenino, anunció a los 28 años su retiro del golf profesional, y explicó en conferencia de prensa: "Me retiro para disfrutar las cosas diarias de la vida". Tendrá idea la amiga Lorena en qué consisten las “cosas diarias de la vida?
Desarrollo:
Fascinante. Siempre me pregunté en qué están pensando los deportistas profesionales que a muy corta edad y en la curva ascendente de su performance deportiva y económica deciden bajarse de esa vida extraordinaria. Lorena Ochoa nos informó ayer que lo que están pensando esos jóvenes malcriados es en “disfrutar las cosas diarias de la vida”. Evidentemente la maravillosa vida que llevan los deportistas de elite les hace olvidar las desventajas evidentes de las “cosas diarias de la vida”. Las cosas diarias de la vida incluyen levantarse lunes a viernes a las 7am, afeitarse todos los días (los demás mortales no podemos presentarnos el viernes con barba de 5 días alegando que es por cábala), ponerse traje, abrocharse el último botón de la camisa, anudarse una corbata, caminar con zapatos abotinados con suela de cuero, manejar en medio de un tránsito infernal hasta la oficina pensando en lo que quedó pendiente del día anterior en la misma oficina, encender la computadora para cuestiones diferentes a chatear o revisar el facebook, odiar el aviso de ingreso de un email porque sólo 1 cada 100 proviene de un amigo, completar un time-sheet (time-shit?) describiendo todas las actividades laborales del día, almorzar revisando un memo, sonreír para ganarse el pan, en invierno salir y regresar a casa de noche, comer lo que hay, ver algo de TV no edificante y acostarse para empezar otra vez. Dos a tres semanas de vacaciones al año. Un viaje al año a alguna ciudad como la gente, volando en económica. Síntesis de las “cosas diarias de la vida”. Será por la suma de gentes ordinarias viviendo esas “cosas diarias de la vida” que tienen tanto rating las trasmisiones de TV que muestran a los deportistas de elite practicando su deporte favorito en lugares espectaculares con millones de dólares en premios? Seguramente sí.
Ergo: los deportistas que eligen retirarse de su deporte a temprana edad están totalmente equivocados en el 99% de los casos. Reservo el 1% de comprensión para aquéllos pocos que se dedican a deportes que conllevan un riesgo para la vida. Al aludir a deportes riesgosos pienso en motonáutica (recuerdo a ex esposo motonauta de Carolina de Mónaco, Stefano Casiraghi, que cambió principado por cielo en meteórica carrera, dejando esposa 8 puntos en sus tempranos 40s, varios millones de herencia y tres niños adorables (Charlotte Casiraghi es adorable, a los que no lo crean los remito a http://www.google.es/images?q=Carlota+Casiraghi&rls=com.microsoft:es-ar&oe=UTF-8&um=1&ie=UTF-8&source=univ&ei=Cu_RS9WuFsO78gbrkLDODw&sa=X&oi=image_result_group&ct=title&resnum=1&ved=0CBkQsAQwAA), y no a ex esposo de Stephanie, más divertido él, que cambió el principado por el circo y dejó esposa 6 traviesos puntos en sus tempranos 30s y deuda de aquellas para que afronte el cuñado Alberto con lo que le sobra luego de pagar a sus guardaespaldas para que le cuiden la espalda y la cintura también –o para que le den para que tenga y guarde por la espalda, por si están poco dúctiles para metáforas; y no pienso tampoco en Scioli, que estaba más seguro en el timón de su catamarán seguido desde el aire por las cámaras de Canal 9 que en el timón de la provincia de Buenos Aires seguido por las cámaras de Kanal 7, ah no, cierto que la transita sólo en helicóptero, ah, cierto que Carlitos yunior también iba en helicóptero por la provincia de Buenos Aires, ah no, cierto que el padre de Scioli vendía electrodomésticos en Santa Fe y Callao y no armas a Croacia y Ecuador); pienso en la Fórmula 1 (Reutemann, Damon Hill, Schumacher, Montoya, Tuero –Pechito López exageró, retirarse antes de empezar es como demasiado); pienso en Mónica Seles, para quien el tennis se puso peligroso a temprana edad con espectadores dispuestos a acuchillarla por la espalda para que deje de emitir esos grititos mientras pegaba con dos manos a diestra y siniestra; y pienso también en el deporte que entretenía a Tiger Woods con 26 gatos diversos, que demostró ser peligroso muy si se lo práctica casado con modelo sueca capaz de perseguirlo a uno blandiendo un hierro 7 por las hasta entonces tranquilas calles de un country de la Florida con intención de separarle la cabeza del cuello a fuerza de golpes, y también demostró ser caro, no por los costos de los gatos, que son libres de impuestos, sino por los 300 millones que se estaría llevando la modelo sueca de corta y exitosa carrera en modelaje y en matrimonio. Todos los demás deportistas que se retiran a edad inadecuada de una vida extraordinaria para vivir nuestra vida ordinaria están totalmente equivocados.
Ergo: los deportistas que eligen retirarse de su deporte a temprana edad están totalmente equivocados en el 99% de los casos. Reservo el 1% de comprensión para aquéllos pocos que se dedican a deportes que conllevan un riesgo para la vida. Al aludir a deportes riesgosos pienso en motonáutica (recuerdo a ex esposo motonauta de Carolina de Mónaco, Stefano Casiraghi, que cambió principado por cielo en meteórica carrera, dejando esposa 8 puntos en sus tempranos 40s, varios millones de herencia y tres niños adorables (Charlotte Casiraghi es adorable, a los que no lo crean los remito a http://www.google.es/images?q=Carlota+Casiraghi&rls=com.microsoft:es-ar&oe=UTF-8&um=1&ie=UTF-8&source=univ&ei=Cu_RS9WuFsO78gbrkLDODw&sa=X&oi=image_result_group&ct=title&resnum=1&ved=0CBkQsAQwAA), y no a ex esposo de Stephanie, más divertido él, que cambió el principado por el circo y dejó esposa 6 traviesos puntos en sus tempranos 30s y deuda de aquellas para que afronte el cuñado Alberto con lo que le sobra luego de pagar a sus guardaespaldas para que le cuiden la espalda y la cintura también –o para que le den para que tenga y guarde por la espalda, por si están poco dúctiles para metáforas; y no pienso tampoco en Scioli, que estaba más seguro en el timón de su catamarán seguido desde el aire por las cámaras de Canal 9 que en el timón de la provincia de Buenos Aires seguido por las cámaras de Kanal 7, ah no, cierto que la transita sólo en helicóptero, ah, cierto que Carlitos yunior también iba en helicóptero por la provincia de Buenos Aires, ah no, cierto que el padre de Scioli vendía electrodomésticos en Santa Fe y Callao y no armas a Croacia y Ecuador); pienso en la Fórmula 1 (Reutemann, Damon Hill, Schumacher, Montoya, Tuero –Pechito López exageró, retirarse antes de empezar es como demasiado); pienso en Mónica Seles, para quien el tennis se puso peligroso a temprana edad con espectadores dispuestos a acuchillarla por la espalda para que deje de emitir esos grititos mientras pegaba con dos manos a diestra y siniestra; y pienso también en el deporte que entretenía a Tiger Woods con 26 gatos diversos, que demostró ser peligroso muy si se lo práctica casado con modelo sueca capaz de perseguirlo a uno blandiendo un hierro 7 por las hasta entonces tranquilas calles de un country de la Florida con intención de separarle la cabeza del cuello a fuerza de golpes, y también demostró ser caro, no por los costos de los gatos, que son libres de impuestos, sino por los 300 millones que se estaría llevando la modelo sueca de corta y exitosa carrera en modelaje y en matrimonio. Todos los demás deportistas que se retiran a edad inadecuada de una vida extraordinaria para vivir nuestra vida ordinaria están totalmente equivocados.
To be or not to be, that is the question, que no es pregunta sino cuestión. La cuestión es que es inadecuada para el retiro cualquier edad en la cual aún te pagan más de lo que te cuesta continuar practicando tu deporte favorito en público. Es una ecuación costo/beneficio pura. Ejemplos: a Maradona sólo le correspondió retirarse cuando el costo dinerario de superar los controles antidoping era mayor al salario que le pagaba Boca Juniors por salir a la cancha cuando le viniera en ganas; a Monzón, cuando ya era más el dinero que gastaba viajando a sus peleas en Mónaco con Susana Giménez que la bolsa que recibía por pegarse con Mantequilla Nápoles en el ring; lo mismo aplica al Pájaro Caniggia y su último club escocés respecto de la tarjeta de crédito de la Nannis (evidentemente Ion Tiriac es menos gastador que Susana y la Nannis, porque Vilas no se retiró nunca y sigue jugando a los 60, ahora con novia thai que le permite ahorrar en masajes con final feliz). Para ir a un caso más terrenal en términos económicos, ahí tienen a Mariano Zabaleta, que sólo se retiró cuando un programa de TV le pagó más por decir huevadas que lo que juntó en promedio en sus últimos 30 torneos de tennis, no sin antes haber probado con una mezcla de las dos cosas, perdiendo primeras ruedas de challengers durante tres años en todos los rincones del planeta con una camarita en la mano, sólo para completar la transición de sets perdidos a sets televisivos sin poner en peligro su propio dinero.
Casos de retiros a edad inadecuada, tomando el tennis por ejemplo comenzando ya: Bjorn Borg, que luego terminó vendiendo sus trofeos para pagarle al psicólogo; Martina Hingis, que regresó para juntar unos Euros y poder seguir comprando droga y se olvidó de que en el ínterin habían comenzado los controles antidoping en la WTA (o hizo todo eso sólo para no ser recordada como la única mina que se pudo levantar Stepanek?); Jennifer Capriati, que se retiró adolescente para dedicarse a afanar vidrieras y regreso joven para mostrar que se podía ganar dinero en el tennis sin tener cintura; Gaby Sabbatini, que se retiró temprano y no consiguió novio y ahora vive de su hermano (ok, sólo para ver si estaban atentos); Justin Henin-Hardenne, que se retiró para poder sacarse el Hardenne y el guión de encima y regresó para arruinarle el regreso a su compatriota Clijsters, que también se había retirado temprano y también volvió a jugar pero en su caso se entiende porque si seguía en el circuito terminaba casada con un grasa de las proporciones de Leyton Hewitt, y eso ya le ocurrió a Steffi Graf con Agassi y semejante desgracia no tiene por que ocurrirle a más de una tenista por siglo. La vida extraordinaria, Lorena Ochoa incluida, es una vida que tiene salarios extraordinarios (o cuanto menos desproporcionados en la relación esfuerzo/riesgo/ingreso); fama; adoración popular; vuelos en primera; hoteles cinco estrellas; limosinas; contacto diario con ejércitos de personas entrenadas en el arte de sonreír y decirles que son fantásticos; días enteros al aire libre; ropa ya no gratis sino paga; lugares reservados en cualquier espectáculo-restaurant-recital-acontecimiento que quieran sin tener que hacer filas, llamar por teléfono o siquiera pagar; y todos los etcétera que quieran agregar los invito.
De esa vida no hay regreso al ostracismo sin pagar costos desmesurados. Ahí tienen todos los regresos de jóvenes retirados extemporáneamente, donde lo único que lograron fue desperdiciar algunos buenos años de su vida deportiva para volver cuando era un poco más que tarde. Michael Jordan, retirado en los Bulls y regresado sin gloria. Michael Schummacher, que se bajó de una Ferrari y volvió en un Mercedes (eso sí es decadencia). Michael Jackson, que se bajó cien pastillas y no volvió más. Michael London, que bajó de la casa de la pradera y no pudo volver a la cima. Michael a secas, que se bajó a Nikita y desapareció para siempre. Sobran ejemplos.
De esa vida no hay regreso al ostracismo sin pagar costos desmesurados. Ahí tienen todos los regresos de jóvenes retirados extemporáneamente, donde lo único que lograron fue desperdiciar algunos buenos años de su vida deportiva para volver cuando era un poco más que tarde. Michael Jordan, retirado en los Bulls y regresado sin gloria. Michael Schummacher, que se bajó de una Ferrari y volvió en un Mercedes (eso sí es decadencia). Michael Jackson, que se bajó cien pastillas y no volvió más. Michael London, que bajó de la casa de la pradera y no pudo volver a la cima. Michael a secas, que se bajó a Nikita y desapareció para siempre. Sobran ejemplos.
No Lorena Ochoa, no vas a disfrutar de la vida ordinaria. En la vida ordinaria suceden cosas que ya no te sucederán. En la vida ordinaria compras tu reloj, tu auto, tu ropa, tus palos de golf, y nadie te paga por usarlos. En la vida ordinaria te tienes que quedar un sábado de sol en tu casa esperando que venga el del service del lavarropas (y no viene). En la vida ordinaria el dueño del restaurant no se acerca a tu mesa y los mozos te exigen que pagues la cuenta. En la vida ordinaria nadie te aplaude aunque pierdas. En la vida ordinaria nadie te aplaude period. La vida ordinaria no es un lugar al que puedas regresar. La vida ordinaria es para aquellos que aprendimos a disfrutar de las cosas simples de la vida comiendo Criollitas.
Sección:
La Noticia Rebelde
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6 comments:
Cuando posa para Playboy ?
Creo que es desestimar el esfuerzo brutal que hacen los deportistas profesionales. Para poder llegar adonde llegó, esta chica, hace 10 años que entrena 12 horas por día, come lechuga y tomate, no bebe, no baila, no va de shopping......no toma mate, no estudia, no sale con amigas y solamente viaja para jugar. Ya juntó suficiente dinero como para vivir ella y su familia el resto de sus días sin trabajar y se va dedicar a hacer todo lo que no hizo durante 10 años. Suerte? seguramente, pero nadie llega donde ella legó, sin esfuerzo y perseverancia.....mucha disciplina y mucho sacrificio.
Estáh equivocada, el golf te deja beber y comer to' lo que quierah.
Solo para agradecer que alguien más recuerde una de las relaciones más histéricas y mal actuadas de la TV, la de Nikita con pecho frío Michael.
Brillante el analisis del iluminado Par Cero. El deporte de elite no existe, deberia erradicarse, lo unico que hace es desviar fondos para que no surjan nuevas estrellas. En lugar de que Federer gane 300 millones, 300 tenistas podrian ganar 1 millon (y no se rian de Zabaleta que gano 3)
Confieso que alguna vez pensé en retirarme del tenis para vivir de mis libros de poemas y de la música, pero solo me apoyaron Raúl Haber y José Narosky.
Abrazo
Willy
PD: La foto de Charlotte me recuerda que le dí masa a la madre en su mejor momento. Por lejos, lo mejor que me dio el tenis!!!
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